lunes, 26 de enero de 2015

Pablo Iglesias, el mesías español


La denominada "casta" se comen  las uñas de solo pensar en que algún día pueda volverse realidad esa “pesadilla” de ver en el cargo de jefe del gobierno español a Pablo Iglesias.
Pero, quién es este personaje que ha puesto de vuelta y media a la política española.
Pablo Iglesias y su agrupación política PODEMOS, apareció de pronto en la escena  ibérica después de sus  exitosos resultados en las elecciones europeas del año pasado, donde obtuvo 5 escaños convirtiéndose en uno de los partidos más votados de su país. Menospreciados por sus poderosos adversarios, hoy se ha convertido en la principal fuerza política.
Si algo caracteriza a sus seguidores es que provienen de distintas tiendas políticas, que van desde el PSOE hasta el PP. Bien lo dijo el mismo Pablo Iglesias: “los padres de PODEMOS han sido el Partido Popular y el Partido Socialista Obrero Español, con sus desaciertos”.
Para que uno entienda del impacto que ha tenido PODEMOS y Pablo iglesias en la sociedad española, lo resumiría  Joaquín Sabina con sus palabras: “si no hubieras aparecido, te hubiéramos creado”, o aquella niña de nueve años en un mitin en la ciudad de Valencia cuando se le  acercó para entregarle una nota que decía: “gracias por devolverle la ilusión a mis padres”
Es que Pablo Iglesias dice las palabras que el español quiere escuchar, mete el dedo en la llaga,  señala y nombra a los verdaderos responsables de esta crisis, empresarios y clase política tradicional y todos esos gobiernos de “golfos e inútiles”. Por estas razones, las  grandes cadenas le han cerrado las puertas, quedándole la internet como único medio para poder dar a conocer sus propuestas que ha calado hondo en la conciencia de todo ese pueblo.
Es que es cierto, esa política económica desigual e injusta que multiplica el desempleo y la pobreza ha hecho mucho daño a España,  indignando a ese pueblo mayoritariamente instruido, que  hace notar su reclamo apoyando esta opción.
Ahora que el Perú gira en torno a un mismo libreto, Pablo Iglesias, estaría proscrito, y su nombre y propuestas serían blasfemias para este fundamentalismo neoliberal defendido por los grandes grupos económicos y la prensa en general, y cómo no, por ese rosario de presidentes que el pueblo ha elegido engañado por sus falsos caretos.
Para los noticieros y diarios locales hablar de desarrollo es titular en sus portadas el número de ricos que ahora veranean en Miami, o  si los autos de lujo han aumentado en ventas. Mientras tanto,  se olvidan que el seguro social es una porquería y la educación peruana es  última de Sudamérica y que los más jóvenes y  ancianos de este país son las principales víctimas de este modelo económico inhumano. Obvian las protestas de los jóvenes peruanos por una ley abusiva y censura los rostros de decepción de los ancianos al recibir esa burla del FONAVI.
Todas estas fórmulas que hoy experimentan en nuestro país, ayer aplicaron en España, y hoy vemos los resultados. Pero España tiene una base industrial y profesionales cualificados junto con una población instruida que pronto la sacarán del hoyo; mientras tanto, yo me pregunto, aquí, qué ocurrirá con el Perú, si hasta la fecha no hemos alcanzado nada importante, salvo inequidad, subempleo, desindustrialización e incultura.
PODEMOS y Pablo iglesias, son la reserva de la dignidad del pueblo español. En cambio, aquí, todavía vemos muy lejano la aparición de algún personaje y agrupación política lo suficientemente civilizada y decente como para que proponga verdaderos cambios en beneficio de la población peruana. Solo hay hordas de salvajes, curtidos en el saqueo y la corrupción.    

jueves, 22 de enero de 2015

Alianza del pacífico y el futuro sombrío del Perú


“Dime con quién andas  y te diré quién eres”  dice el dicho popular.  Un día Alan García,  sin mediar plebiscito alguno  nos despertó con la noticia de que formábamos parte de una llamada Alianza del Pacifico. Fue tan precipitado   y   sorpresivo  esto,  que  no dejaba de despertarme dudas, sobre todo por la premura de su concepción, ensombreciéndolo como un acto forzado por algo o por alguien,   como cuando  eras niño y sentías  que tus padres a empellones  te obligaban  a estar con gente que no querías.   
¿Una alianza junto a  Chile,  Colombia y  México? Honestamente era como reunirse  con los  malos de la película y en cierta medida  también significaba  ir en contra de la historia y en lo que en este momento  están escribiendo los pueblos latinoamericanos.
Colombia, violenta y corrupta, su inequidad  ha obligado a una diáspora a muchos de sus pobladores.  Chile, antítesis histórica,  el judas de Sudamérica que sigue manteniendo esa humillante política en contra de muchos compatriotas. Y México, la top en decadencia, podredumbre  social  y su televisado narco estado y genocida. Bonitos indeseables   con los que tenemos que codearnos.
El caso mejicano es el más exagerado, son más de cien millones de hacinados en la meseta de Anáhuac,  salvo raras    excepciones, son cien millones de víctimas de sus propios prejuicios.  La ignorancia propagada  las veinticuatro horas del día por las pantallas de Televisa y otras cadenas parecidas han  vuelto a gran parte de ellos  tan torpes y desordenados como “el  Chavo del Ocho”, otros  tan cerriles  como ese  grupo de mierdecillas en ese programa de culto latinoamericano, haciendo  burla  del profesor “Jirafales” cuando este, intentaba llevarles  algo de civilización, y otros  tan superficiales,  segregacionistas,  arribistas y violentas como la misma “Doña Florinda”,  y tan ociosos y corruptos como el conocido  “Don Ramón”.
Alguna vez, Gisela  Valcárcel,  cuando le fue yendo mejor económicamente, uno de sus primeros viajes que realizó al extranjero fue a México. Cuenta que después de bajar del avión  y abandonar el Benito Juárez esperó encontrarse con aquellos  rostros  que  veía  en las  novelas,  series y películas que mostraba  la filial de Televisa en el Perú.  Pero, grande fue  su decepción al ver que la gran mayoría de mejicanos no poseían esos  rostros blancos  y europeos, sino, más bien,  eran morenos e indígenas. 
Esa es la realidad de México, un pueblo mohíno  y transido. El  bicentenario ha cogido al estado mejicano corrompido hasta la medula. Es tal la podredumbre  que a estas alturas  ya no se puede diferenciar a una autoridad pública de un mafioso del narcotráfico. Cuando alguien por dignidad quiere alzar su voz de protesta, ese estado no pestañea  ni lo duda un segundo para utilizar la masacre y el genocidio para acabar con esas protestas casi siempre de estudiantes, porque saben que matando a los más jóvenes acaban con el mal desde temprano. Ahí  están  la conocida masacre de Tlatelolco  y  últimamente en Iguala.  
El mejicano está solo porque nadie correrá en su ayuda, y lo peor es que no existe una conciencia nacional  porque si se encuentra algo parecido, esta, ya ha sido apropiada por televisa   y se encuentra digitada al antojo por sus élites.
Esa receta que se vendió a Méjico  durante el pasado siglo, de hacerles creer que son occidentales, ha fracasado, porque México no es Canadá ni Estados Unidos.
México, es un pueblo milenario aunque sus  medios de comunicación digan lo contrario y los haya desvinculado  de sus verdaderas  raíces  haciéndoles creer que son feos y despreciables, resignándolos a una eterna suciedad y corrupción.
Ese es el gran problema de México, aun no acepta su rico pasado y no lo interioriza  ni lo ha inspirado para crear una nación más moderna y autentica.
El modelo mejicano ha fracasado,  porque solo produce inequidad,  corrupción y muerte. Es un modelo inhumano y autodestructivo.
Pero lo más triste de este culebrón es que este modelo  hace buen tiempo se intenta implantar en  nuestro país.  Algún grupo de  idiotas en este país,  sigue  obstinado en hacernos creer que estas recetas llenas de inequidad desindustrialización, injusticia social, egoísmos, frivolidad, televisión basura, incultura,etc., son la solución para nuestros problemas; pero no saben que esta fórmula produce baja autoestima dentro de ellos  y tal  desánimo  y desvalor,  que se manifestará más pronto que tarde en caos,  corrupción y violencia.

lunes, 12 de enero de 2015

Mariana Ramírez del Villar, "Esto es guerra" y su guerra étnica

El Perú es un país muy diverso, en todos los sentidos, desde los climas, biomas,  culturas y  sobre todo etnias. Y esto cualquiera se daría cuenta, solo con salir y caminar por sus ciudades. Hasta dentro de una familia peruana muchas veces se logra ver estas diferencias de colores y matices.
El mundo también es diverso:somos 7,000 mil millones de seres humanos con cientos de idiomas, culturas y pueblos.
Dentro de una convivencia democrática sana, debe existir el respeto y la tolerancia a esta diversidad que es una característica primordial, sobre todo de  nuestra sociedad, pero esto no ocurre así.
Uno de los grandes males de nuestro país es la ignorancia, la incultura, y esto produce al que lo padece enormes prejuicios, supersticiones y estereotipos. Muchos de estos ciudadanos que sufren esta especie de enfermedad endémica cuentan con cierto auditorio sobre todo en países como el nuestro, tercermundistas.
En un mundo, en este momento, conmovido por los acontecimientos en Francia, provocados por la intolerancia y los extremismos, los peruanos debemos entender lo dañino que significa difundir, imágenes e ideas etnocentristas y aquellos fundamentalismos como los de tipo racial.
La denominada televisión basura peruana hace buen tiempo tiene como uno de sus programas emblemáticos a “Esto es guerra”. Y nos preguntamos: ¿Quiénes son los creadores de semejante bodrio?
Pues, una de sus productoras es la señora Mariana Ramírez del Villar. Con propios méritos –digamos malas artes- ha salido a la palestra, mostrando su fundamentalismo, aferrada  a un odio visceral en contra de lo multirracial y diverso: Este radicalismo lo justifica con “fórmulas exitosas”, escéptica del daño que hace al resto difundiendo el racismo por las pantallas. Sorprende, siendo hija de un nacido en Arequipa, tierra orgullosa de su mestizaje.   
Es que es cierto, existe  un grupúsculo, bárbaro e ignorante que maneja la televisión peruana, que le importa un huevo de pato el resto, pero,  nadie puede detenerlos –ni siquiera las buenas intenciones de algunos ni las leyes-, son gente mala, que por el afán de lucro difunden con ventilador los prejuicios raciales para que el peruano involucione en caos. Y todo este atropello ya está dando sus frutos, cuando unas madres y sus hijos –así de idiotas como para seguir ese programa- se indignaron el otro día,  ante el maltrato y desencadenaron esa violencia, una violencia que siempre aparece con el racismo y la discriminación.
La señora Mariana Ramírez del Villar en su programa “Esto es guerra” ha volcado una especie de guerra étnica de superioridad racial en contra de la mayoría de peruanos, se aprovecha de ese telespectador vulnerable y les da lo que quieren, haciendo el triste papel de proveedor de adictos. Ella y su equipo, no sé a saciado con ese libreto decadente que descarría a la juventud peruana con su  racismo, porque, ahora, amenaza a los más jóvenes  con su “Esto es guerra teens”.
La adolescencia es una edad crítica en el desarrollo del ser humano, en este periodo este joven homosapiens busca modelos de conductas, que al encontrarlos, mal o bueno, influenciaran en su pensamiento y acciones, y lo llevaran por el resto de sus vidas. 
Los adolescentes como menores de edad deberían  ser protegidos por el estado, pero, parece que ahora serán presa fácil de las malas intenciones de estos grupos intolerantes.
En el mundo el racismo y los fundamentalismos siempre han provocado violencia y nuestro país no es ajeno a ello. Lo más terrible, es que existen peruanos que lo difunden impunemente.
Una sociedad peruana pacífica será más tolerante y respetuosa con su diversidad, y personas como la señora Mariana Ramírez del Villar no colaboran con esta intención de poner un granito de arena para construir esa paz en nuestro país. Una forma sería  mostrando una televisión peruana real, sana, con sus verdaderos y variopintos rostros.  
La madre de “Esto es Guerra”, la señora Mariana Ramírez del Villar, debería dejar el conformismo  de las formulas supuestamente ganadoras y atreverse a ser pionera en algo. Una forma sería, enseñando  al peruano que forma parte de un país diverso y multicultural, y esto, siempre formará parte de nuestras principales riquezas. 

miércoles, 7 de enero de 2015

¡Estoy contigo Charlie Hebdo!

Enfrentarse al poder, trae sus riesgos, sobre todo porque la vida del temerario siempre correrá peligro.
La revista francesa Charlie Hebdo,  hasta hace horas desconocida en el mundo, hoy  ha pasado a ser titular de todos los medios de esta aldea global, al haber sido blanco de un  atentado terrorista. Hasta este momento se cuentan 12 víctimas, dentro de ellos el editor del semanario Stephane Charbonnier y otros caricaturistas.
Según las imágenes difundidas, fueron tres hombres provistos con Kalashnikovs y chalecos antibalas los que irrumpieron en el edificio donde funciona la revista. 
Según  los especialistas en el tema, los que perpetraron el atentado aparentan ser veteranos de guerra  y expertos en la materia. La frialdad con la que rematan al policía,(ni siquiera el verdugo lo mira después de ejecutarlo), además, se ve en las fotografías que la forma agrupada de los impactos en el parabrisas del patrullero denotan una precisión que solo se puede lograr gracias a un especializado entrenamiento militar.
Pero, ¿Qué hizo la revista Charlie Hebdo, para merecer semejante represalia a vista de toda la enorme y eficiente seguridad gala?  
La revista Charlie Hebdo, fundada en la década de los noventa, forma parte de un periodismo francés que a jugado un rol muy importante en la historia de ese país, un característico periodismo mordaz e incisivo que ya se hacia notar desde el siglo XVIII, cuando destapaban la corrupción y el despilfarro de la corte. 
Hoy con su estilo siempre provocador hacia burla del cochambre de los políticos, la policía, los banqueros y extremismo religioso dentro de Francia. 
Entonces al referirnos a esta revista, no estamos hablando de un simple pasquín, si bien su tiraje había decrecido en las últimas  décadas. Su sátira aderezaba diariamente sus comics, su humor gráfico y sus infaltables caricaturas, y ponian de vuelta y media el ambiente político, incomodando a muchos grupos poderosos dentro de Francia, seguro que algunos de ellos habrán sentido un cierto alivio al observar la difícil situación que hoy está pasando dicha revista. 
En estos momentos, la prensa oficial habla que este atentado fue provocado por grupos musulmanes que despertaron su ira a raíz de la difusión que hizo el medio acerca de unas caricaturas de Mahoma. 
Las primeras consecuencias de estos atentados seguro será que los partidos y líderes de la extrema derecha francesa obtengan mayor cobertura, avivando de esta manera el fuego del nacionalismo y la xenofobia, que hace buen tiempo vienen madurando dentro de la política francesa.
Al ver esas crudas imágenes, pienso que a pesar de lo que creyeron los que perpetraron este infame atentado, estamos seguros que la revista saldrá adelante, ya que posee esa identidad y la historia suficiente como para poder curar estas heridas y revitalizar esas ideas que hacen que la libertad de expresión siga sobreviviendo en el mundo civilizado, algo magullada pero indemne.
Hoy Francia otra vez nos enseña lo importante que significa defender la libertad y la democracia, y que esta seguirá existiendo en el país europeo como aquí en el Perú (con sus 13 añitos), gracias a estos nuevos mártires, que con sus vidas nos han demostrado que la pluma siempre será más poderosa que cualquier supuesta omnipotencia económica, militar o como en este caso religiosa. 

Ridley Scott en su Waterloo

  Las oscuras nubes de unas horas bajas no solo ensombrecen a Occidente en su enfrentamiento con Rusia para conservar la unipolaridad en el ...