martes, 31 de marzo de 2009

Raúl Romero y los patos y las patas



Si algo ha caracterizado en estos años al conocido conductor de televisión Raúl Romero en  su permanencia en la televisión peruana, han sido las numerosas acusaciones sobre su encarnizada defensa a las maneras viciadas de actuar del régimen fujimorista,  pero, también, las denuncias de su inocultable prejuicio racial que lo muestra sin desparpajos en sus programas y también en las letras de sus canciones como aquella "Los patos y las patas", donde muestra su más ridículo racismo y sus  más bobos estereotipos cuando escribe por ejemplo y lo berrea,  dando a entender que todos los hijos de los Quispe son negritos y barrigones,  -qué tal hijo de puta-, despotricando el ignorante y faltándole el respeto a un apellido peruano y a los connacionales que lo llevan,  cuando este bufón tiene tremenda "ropa tendida".
Y ahí está lo interesante y hasta paradójico de este personaje, y nos obliga a preguntarnos ¿Cómo podría una persona de tan recio mestizaje ser racista?
Al analizar su biografía, encontraremos algunos argumentos que nos hacen entender las razones de esa posible dramática actitud racista, motivada quizás por diferentes complejos y traumas que no ha podido superar con el correr del tiempo.
Al hurgar dentro de su vida encontramos que su madre es originaria del departamento de Madre de Dios, de donde probablemente procede su herencia indígena, y el padre fue un español de origen catalán y que por el apellido Romero podriamos asegurar que es descendiente de algún inmigrante pobre del sur de España y que emigró como tantos otros miles en busca de un futuro mejor a la prospera Barcelona.
Durante buena parte de su vida la pasó en el distrito clase mediero de Magdalena. Según sus propias palabras siempre fue un alumno problemas y no aficionado al estudio.
Luego se dedicó a ganarse la vida haciendo música mediocre pero “chacotera”. Al alcanzar la fama con un programa de televisión en los años noventa, se alineo ideológicamente al fujimorismo, dándole -segun los medios- buenos dividendos a su fortuna personal.
Pero, es justamente en este periodo, donde hace notar su incontenible pensamiento racista, intolerante y violento.
Al ver el rostro de Raúl Romero, vemos claramente la herencia indígena heredada de su madre y nos demuestran además, como mucho mestizos peruanos no han sabido aceptar su herencia ancestral, sino, todo lo contrario lo ocultan y lo niegan, lo cual va a influenciar en su autoestima personal.
Ese racismo que demuestra Romero, habla de la vergüenza y el desprecio que siente él y su familia y tambien un buen número de peruanos por esa parte tan importante de sus orígenes, su herencia andina.
Ahora ya con hijos, probablemente ocultará la foto de la abuela o de la bisabuela que vivía en Cusco o Puno, y que tuvo que emigrar al departamento peruano más alejado de la civilización Madre de Dios, como ocurrió con buena parte de la población de ese departamento selvático.
Ahí estaría lo paradójico y hasta enfermizo de los orígenes de la conducta de este personaje, lo cual demostraría, al igual que millones de peruanos, como entra en conflicto su mundo interior al esconder, al mentir, al falsear y al crearse y creerse identidades ajenas. Las cuales con el tiempo, serán siempre una de las principales razones de la baja autoestima del peruano promedio, estas tambien son las causas de aquellas derrotas permanentes.
Cuando vamos a aceptarnos tal como somos y atrevernos a mandar a la mierda todos aquellos prejuicios que solo nos traen decadencia y degradación. Tú solo tienes la solución, acepta racionalmente tu identidad y no la ocultes.

lunes, 30 de marzo de 2009

La gran difamación peruana



En el Perú, desde la conquista española, durante estos 500 años, se ha diseminado entre su población, la herrada idea de que la cultura andina es inferior a la hispana. Inexactitud que ha sobrevivido hasta nuestros días dentro de nuestra sociedad en forma de estereotipos y prejuicios.
Pero, ahora, con las últimas investigaciones, todo esto está cambiando, porque se ha descubierto que estas ideas erradas no tienen sustento.
El considerar inferior a la cultura andina nació deliberadamente allá por el siglo XV, durante los primeros años de la ocupación hispana.
Las autoridades españolas al consolidarse políticamente con  el gobierno del virrey Toledo, establecieron un sistema que privilegiaba lo hispano sobre lo andino. Sabedores de los avances en cuanto a desarrollo cultural de parte de los recientemente conquistados, los vencedores audazmente idearon una forma de dominio sobre la enorme y mayoritaria población indígena, con tal objetivo, los sometieron a una de las mayores difamaciones de la historia, solo comparable con la que hicieron los romanos en contra de los cartagineses.
Esta difamación consistió en considerar inferior a la cultura autóctona andina frente a la  traída en las carabelas. Estos infundios se fueron diseminando dentro de la población gracias al trabajo sistemático de toda la estructura  del nuevo sistema colonial, desde el virrey hasta el cura, todos ellos formaron en la conciencia de la mayoría de la población una nueva forma de ver el mundo, un mundo en donde el poblador de estos territorios se consideraría inferior de por vida.
Este conjunto de creencias hicieron aceptar a los habitantes de estos territorios  toda esa discriminación, rechazo y exclusión a la que fueron sometidos.
Esto resultó un verdadero éxito para el sistema colonial español porque mantuvo a la población sometida durante tres siglos.
Con la llegada de la independencia y la República, el poco conocimiento que se tenía del mundo andino, y el hecho de reducir su entendimiento a solo observar la degradada condición en el que se encontraba la población indígena,  esta costumbre de considerar inferior al mundo andino frente a lo hispano se  continuó manteniendo influyendo notoriamente en la autoestima del peruano mismo.
Con el correr de los años y afirmando que nada en este mundo es estático, mucho menos las ideas, la era del conocimiento nos ha demostrado que esa difamación no podía continuar y los nuevos hallazgos nos está demostrando que la cultura andina es una de las más importantes del mundo y que esta supuesta inferioridad ha quedado totalmente descartada.
El descubrimiento de Caral y sus restos que se van recuperando, han colocado a la cultura peruana como un importante foco civilizador del planeta,  demostrándonos que nuestra cultura y el peruano,  tienen bases científicas suficientes para afirmarlos  como una sociedad muy importante y con derecho a ser protagonista en el devenir de los acontecimientos más trascendentales de la humanidad.
El peruano  heredero de esta cultura y con estas evidencias,  es hora de que asuma su verdadera identidad de forma racional y de esta forma eleve esa autoestima, tan menguada estos siglos por una autoflagelación  al rechazar sus orígenes por considerarlos erradamente  inferiores producto de toda esta difamación que lo ha llevado a desconocer su verdadera valía.
La reconquista andina iniciada en Vilcabamba no ha terminado,  continúa. Los españoles tardaron 8 siglos para desalojar a la cultura invasora de la península ibérica, nosotros apenas vamos 500 años.


lunes, 23 de marzo de 2009

La sangrienta selva limeña


La muerte del periodista Álvaro Ugaz a pocas horas de la de un catedrático norteamericano y su familia, nos demuestra  que transitar por las vías limeñas hoy en día se ha convertido en una verdadera ruleta rusa.  Las muertes son diarias y cada vez más numerosas , y las autoridades no hacen nada para contener esta ola incesante de accidentes de tránsito mortales que vienen tiñendo de sangre las pistas limeñas y produciendo mucho dolor entre los familiares de las víctimas de esta especie de Lagos sudamericana  en  que se ha convertido la capital peruana.
Esta ciudad es el ejemplo claro de como una sociedad bárbara puede crear este tipo de conglomerado anárquico, desordenado, sucio, sediento, contaminado, y la verdad que no nos cansaríamos en describirla con los peores adjetivos a esta ciudad que se va pareciendo cada vez más a la tropical Dacca pero en versión peruana.
Vivir en esta ciudad es andar a salto de mata, es convertirte en un ser alejado del menor rasgo de civilización, en donde sus habitantes se han convertido en australopitecos aprendiendo a manejar, en neandertales controlando el trafico, en paleolíticos cruzando calzadas, en donde los ricos limeños se han transformado en roedores asustadizos que se encierran en sus residenciales, con guachimanes armados hasta los dientes, sin saber si están protegiéndolos de delincuentes o están vigilando a reclusos apartados del mundo en sus presidios dorados y que viven con el temor constante de no saber si serán secuestrados ellos o sus hijos, moran cercados en esa penitenciaría que ellos mismos se han construido fruto de su egoísmo genético.
Esta es la cruda realidad de esta selva sangrienta limeña, en donde hay más probabilidades de hacerse ganador del embiste de un camión, a que te ganes el premio mayor de la tinka.
Cuídate al salir y despedirte de tus seres queridos, porque puede ser el último día de tu vida en ese conglomerado de salvajes en el que se ha convertido ese lupanar que fundó apresuradamente el iletrado e ignorante Pizarro.

miércoles, 18 de marzo de 2009

LA HOJA DE RUTA

 


Hace cinco mil años fuimos un foco de civilización en este planeta y gracias a nuestra creatividad y autoestima logramos grandes avances y aportes para la humanidad.  
Al igual que nosotros, culturas milenarias como China, Japón, Corea del Sur, aprovechan estas caracteristicas como pueblo para prosperar dentro de la comunidad internacional.  
Por estas razones nuestra población debe reconciliarse con su cultura primigenia andina, su verdadera madre patria. 
Los habitantes de este país, mediante una rígida auto-afirmación cultural rescatando aquellos valores milenarios les llevará a realizar grandes cambios en su mentalidad y conducta. Será un renacimiento andino,  muy parecido al que sufrió Europa cuando dejo el oscurantismo medieval y rescató los avances greco-romanos.  
Aqui en estos territorios andinos, hemos vivido quinientos años de tinieblas olvidando aquella época en donde fuimos creativos y autónomos, pioneros en arquitectura sísmica con Caral (3000 a.C.), cirugía al cerebro gracias a los Paracas, y un sin fin de avances humanos coronados con el desarrollo inca que nos legaron Machu Picchu y un ejemplo de estadista como Pachacutec  que hoy está a la par de Napoleón, Alejandro Magno o Julio Cesar. 
Los incas y el mundo andino significó el compendio de más de 20, 000 años de desarrollo humano que debe ser la fuente de donde deben estar las soluciones para nuestros centenarios problemas, rescatar aquellos valores que harán a los habitantes de estos territorios alcanzar ese esquivo desarrollo. 
Una forma de transmitir estos valores y crear esta nueva autoestima para los habitantes de este país es difundir la enseñanza del idioma Quechua en las escuelas de todo el país porque así  esta población conocerá y entenderá su real cosmovisión andina.  
La identidad personal y el sentido de pertenencia a una nación milenaria, son bases para elevar la autoestima de estos habitantes. En este aspecto la educación toma enorme importancia. 
No puede haber desarrollo sin una coherente y sensata organización. La descentralización del ente estatal autónomo es fundamental para su eficiente administración. Por lo tanto este país debe ser una República federal.  
Se debe devolver la capitalidad política a la ciudad del Cusco, porque esta urbe representa para el Perú en materia de historia e identidad nacional, lo que Londres significa para Inglaterra (Reino Unido) o Berlín para Alemania; no es casualidad, que apenas ocurrido la reunificación alemana regresaran inmediatamente la capital germana a las orillas del Spree. 
Regresando la capital política al Cusco se daría un gran paso para devolver a este país su verdadero espíritu e identidad como nación. 
Las Instituciones del Estado deben fortalecerse, buscando mecanismos milenarios rígidos que logren su estabilidad desapareciendo de raíz la corrupción que es un mal que carcome el espíritu de la nación  y debilita su soberanía. 
Los poderes del Estado deben ser independientes y autónomos, la democracia se debe de impartir desde las escuelas y el empoderamiento de la sociedad porque la democracia es el sistema político menos negativo, la libertad en todos los sentidos.
La secularización del Estado y de la sociedad es primordial porque era la meta del milenario mundo andino truncado en 1532. Para esto, el Estado debe ser realmente laico porque a eso nos tenía que llevar nuestra evolución. Debemos seguir  ejemplos de otras sociedades como Francia, para que no se limite el pensamiento humano. La laicización del Estado y la educación permitirá difundir no solo el principio de libertad de conciencia sino el principio de libertad de pensamiento, que aun no se ha instaurado en el Perú desde el siglo XIX,  por estas razones el desarrollo de nuestra sociedad sigue siendo una utopía, frustrando así ideas vanguardistas que ya proponían los grandes Ilustrados franceses o los fundadores del Estado Norteamericano en el siglo XVIII, hoy censurados en esta comarca subdesarrollada.
En la vida del Perú los militarismos y caudillismos han hecho mucho daño y son causante en parte de nuestro atraso. La democracia debe partir desde la conformación de los partidos políticos y su fortalecimiento debe ser necesario para una futura estabilidad democrática. Los militares deben entender que el mejor papel que pueden desempeñar para su país es justamente dentro de sus cuarteles.
Las Fuerzas Armadas deben democratizarse y profesionalizarse, la moral, la autoestima debe volver a estas instituciones, entendiendo el significado de democracia y el respeto a los Derechos Humanos. Por estas razones tienen que democratizarse para no ser caldo de cultivo de un futuro dictador o un genocida.
La historia nos ha enseñado que la prosperidad de los pueblos crece cuanto más alientas el intercambio comercial dentro y fuera de tus fronteras.  Hace  cinco mil años ya Caral prosperaba con este tipo de economia.  
Se debe regresar a la soberanía nacional los ferrocarriles privatizados en la década fujimorista por ser estratégicos, adicionados a estos, se debe ampliar la red hasta la orilla del río Ucayali.  
En materia militar se debe adquirir 300 tanques rusos de última generación. 
En la marina de Guerra se debe construir un portaviones ligero para que sirva como buque insignia.
Este país en materia diplomática y geoestratégica debe fortalecer su presencia en influencia en su espacio histórico (Ecuador y Bolivia).
Se tiene declarar puertos libres para la exportación e importación de cualquier producto en el norte del país Salaverri y en el sur Matarani.

domingo, 15 de marzo de 2009

Luis Bedoya Reyes y el pecadillo



Dentro de los políticos más importantes de la historia reciente de nuestro país se menciona a Luis Bedoya Reyes el fundador del Partido Popular Cristiano (PPC). 
A este señor, se le recuerda por realizar una buena gestión como alcalde de la ciudad de Lima allá por los lejanos años 60’, y, por haber cogobernado junto al probo, pero, a la vez inepto Fernando Belaunde Terry, en el periodo 1980- 1985. Además, Bedoya fue en cierta medida, causante de la derrota política de Mario Vargas Llosa en las elecciones presidenciales de 1990.
Hubo un hecho en su semblanza que particularmente a nosotros nos causó enorme frustración y nos abrió los ojos sobre la clase de gamberros que existen dentro de la clase política peruana.
Hace algunos años, durante el escándalo de los famosos “vladivideos”, se mostró uno en donde justamente se apreciaba las imágenes de su hijo Luis Bedoya de Vivanco  recibiendo 25,000 dólares de parte de Montesinos, dinero que le serviría para financiar su campaña electoral que lo llevaría posteriormente a obtener la alcaldía de Miraflores.
Con semejantes pruebas, Bedoya de Vivanco fue juzgado y condenado a algunos meses en prisión.
Pero ese no fue el asunto. Lo sorprendente fue la reacción del fundador del PPC. Nosotros ingenuamente, pensábamos, que la vejez es sinónimo de sabiduría y, que esos vastos conocimientos adquiridos con la experiencia de liderazgo, lo llevarían a tener un comportamiento lúcido y digno de un personaje político de su talla frente a la crítica situación de su vástago.
Esperábamos de Luis Bedoya Reyes, el descargo frente a las acusaciones que pesaban sobre su hijo, aguardábamos las palabras precisas, esas que estén a la altura del líder y fundador de uno de los partidos más importantes de la historia reciente de nuestro país, pero, ocurrió todo lo contrario.
En el afán de defender lo indefendible ante las innegables muestras de corrupción de su hijo, el viejo líder pepecista increpó: ¡Esto es una injustica! ¡Mi hijo no ha cometido ningún delito! Si solo ha cometido un “pecadillo”.
Para él, un acto extremo de corrupción, es solo un insignificante “pecadillo”. Estas palabras nos cayeron como un balde de agua fría y le pusieron en nuestro imaginario en ese lugar en donde habitan solo los bárbaros sudacas con esa peculiar escala de valores y dibujándonos, asimismo, la clase de políticos que han venido dirigiendo a nuestro país y la política peruana todas estas décadas.
Estos desmedrados de moral y de valores no tienen vergüenza en demostrar su baja catadura, demostrándonos que han perdido todo rasgo de dignidad en su persona.
La falta de valores y de ética de esta especie de matarifes de la nación nos están llevando y nos llevarán a las más profundas degradaciones del ser humano y del Estado.
Con este tipo de personas tan enviciadas nunca podremos construir un país prospero y de bienestar. Este tipo de políticos nos ha conducido a este estado de corrupción generalizada que sufre actualmente nuestra sociedad.
Los políticos peruanos deben de hacerse una auto crítica racional, y decidir de una vez por un cambio en sus formas birrias de actuar. Ya no se pueden permitir este tipo de actitudes en un país, en donde, cada vez más, campea los actos más repulsivos de barbarie y la impunidad de los más execrables delitos.
Queremos o no ser un país desarrollado y civilizado o es que en realidad queremos seguir encerrados en nuestras mansiones para seguir siendo desde la visión de occidente unos bárbaros e inconscientes negreros.

jueves, 12 de marzo de 2009

Magaly Medina y la despedida a un “familiar”


Si tenemos que hablar sobre el estado de degradación de algunos peruanos, Magaly Medina, es uno de esos personajes que nos inspira permanentemente.  
Hace algunas noches la observamos en un estado que nos llamó mucho la atención. 
Como todas las noches estaba rumiando incoherencias, pero, esta vez se le notaba dolida. Creímos que esa pena lo originó la perdida de algún familiar o algo parecido, pero no fue así, porque grande fue nuestra  sorpresa al ver que aquellas palabras póstumas estaban dirigidas nada menos que a su mascota muerta recientemente.
Esta mujer, reina y representante de aquellos seres carentes de escrúpulos, nos confirma una vez más, el alto costo que significa enriquecerse ventilando la basura a diestra y siniestra, con una frialdad del más inconmovible sicario y la ética del más desalmado traficante de humanos.
El sistema no es malo pero es pendejo porque crea modelos, los utiliza mientras sean necesarios y luego los desecha arrojándolos al relleno sanitario como todo producto "plástico" y contaminante. Pero aquí lo tragicómico es que estas victimas se la creen y se asumen dueños de la "verdad" y de lo que significa "triunfar" en la vida y los "derechos" que sus incautos seguidores deberían reclamar. Al final resulta solo viruta que terminará infectando por dentro a incautas mujeres  y con ellas a miles de familias. 
Una mujer es el centro de una familia y siempre lo ha sido durante estos miles de años, pero, Magaly, con su discurso corrosivo termina minando el núcleo familiar porque hace apologia a la envidia, a la desconfianza, al recelo dentro de la pareja, a ver al hombre como el enemigo del que se deba sospechar y vencer. Su fracaso como mujer centro de cohesión dentro de una familia lo quiere difundir al resto de proles peruanas que la observan y la siguen.  Los condenará a la disgregación, a la destrucción de estas familias que al final significará la destrucción de la misma sociedad. 
El personaje Magaly Medina no es ejemplo de nada, puede ser,  tal vez,  una señal de alarma para recordarnos que hay que asquearse de seguir viviendo embarrados de corrupción y  barbarie. Una enfermedad que carcome no solo a este personaje sino tambien a muchos por estas tierras sometidas a la barbarie del subdesarrollo y la pobreza de valores humanos.
Pero, ¿Cuándo en ella comenzó esta enfermedad? 
Seguramente, esta decadencia comenzó cuando se obsesionó por la riqueza. 
El maltrato al que fue expuesta por su condición de migrante o el de poseer esos rasgos no permitidos por la dictadura de los cánones que significa ser "normal" o "bien", desencadenaron en ella una supresión de todo lo humano. 
A partir de este trauma, el único objetivo sería el dinero, la riqueza, sin importarle el cómo, es la disyuntiva (si es que la hubo en algún momento), que te obliga a elegir lo ilícito, quizás, como lo haría la puta mas requerida del burdel en aquellas pocas noches de numerosa y sedienta clientela.
La gente que la sigue, no advierte de la amenaza que ella representa, quizás, al final siempre tiene que haber victimas, y personajes como Magaly Medina, ayudarán para que este circulo podrido nunca acabe. Pesará más entre ellos querer verse como el nuevo "cholo" con plata, sin entender que serán los estafados del sistema. No lo perciben o lo hacen muy tarde, que obtener riqueza por medio de la corrupción, es en realidad vender tu alma al "diablo" que al final siempre te pedirá su parte, y esa será la parte más dolorosa  que este cojudo tendrá que pagar por esa fotografía del supuesto "triunfo".
Miles de años los chuchos han acompañado a los humanos y son "fuente de enseñanza", porque sienten lo que los seres humanos no palpan, se enferman si estamos enfermos, y perecen si no encuentran esa energia saludable que necesitan de nosotros.
Magaly está podrida por dentro y sus mascotas lo huelen  por eso ninguna de ellas llega a sobrevivir hasta la vejez. Es su aliento decadente que marchita la vida. 
 

jueves, 26 de febrero de 2009

Fernando Belaúnde Terry ¿Qué semejanzas encontramos con Stalin y Hitler?




Uno de los presidentes peruanos, al cual el periodismo y la clase política local le guardan un grato recuerdo, es el desaparecido Fernando Belaúnde Terry.
Afirman y aparentemente  fue un hombre honesto, probo que terminó sus últimos días austeramente en un olvidado departamento de Miraflores, olvidándose, astutamente, que este personaje  forma parte de la etapa más oscura y dramática de nuestra historia reciente de nuestro país y que durante sus dos desastrosos periodos de gobierno, nos llevó -sobre todo en el  último- casi a la bancarrota fiscal, y sin nombrar, los numerosos casos de corrupción en los que estuvieron inmersos muchos de sus allegados políticos.
De todas estas birrias memorias, se han  olvidado la  siempre desinformada opinión pública peruana,  porque no solo fue nefasto en esos aspectos, sino también  durante su último periodo, que va desde 1980 a 1985, se realizaron  en el campo internacional y en el frente interno los peores desaciertos.
En el campo internacional, como uno de los más torpes estadistas de la historia peruana, Fernando Belaúnde Terry apoyó a la dictadura fascista argentina que por esos años se  enfrascaba por  mantenerse en el poder,  inventando un conflicto con el Reino Unido por las islas Malvinas. El respaldo a esos militares nazis fue  tan exagerado que mostraba del caudillo su verdadera alma,  tirana y  fundamentalista  que se inclinaba  del lado de los que destrozaban la economía y los derechos fundamentales de  los rioplatenses.
En el frente interno se convirtió en unos de los  mayores genocidas,  no solo de la etapa republicana del Perú sino también de la historia universal, porque no le bastó con dejar matar a pacíficos  periodistas sino que mostró lo mejor que le había dejado  su formación familiar racista,  aniquilando en sus cinco años de su régimen  a miles de niños,  jóvenes, adultos y ancianos campesinos quechuahablantes en los Andes peruanos.
Hoy en día que ya nada se puede ocultar a la opinión pública mundial, se están desenterrando en la localidad de Putis (Ayacucho) una de las mayores fosas comunes jamás encontrada en el territorio peruano, de donde se están rescatando hasta este momento,  mas de cien cadáveres de personas dentro de los cuales se encuentran numerosos niños. Según aseguran los especialistas, en los Andes se encuentra cientos de fosas comunes parecidas a las de Putis, las cuales corresponden a los años de 1980 a 1985, justamente en el segundo gobierno de Fernando Belaúnde Terry.
Los hechos y números no mienten, y fue en el gobierno de este inepto, incompetente y genocida gobernante donde se produjo por el mal manejo de la economía peruana una hambruna para casi el sesenta  por ciento de la población y, se ejecutó el mayor pogromo en contra de miles de campesinos  peruanos.
Fernando Belaúnde Terry, sin lugar a dudas, con estos actos, se sitúa en la cúspide de los peores presidentes que han gobernando  nuestro querido país  y pasa con méritos propios  a formar parte de esa “ilustre” y “exclusiva” galería de los mayores genocidas de la historia de la humanidad, junto con los tristemente célebres: Slobodan Milósevic, Iósiv Stalin o Adolf Hitler.
Es una semblanza mas,  indiscutible,  honesta e  innegable de uno de los tantos torpes caudillos que han gobernado nuestro país durante el siglo XX, fue una generación hipócrita,  faltos de inteligencia y valor,  no se atrevieron a mejorar  la casa y a reconocer sus  errores, llevándonos en su obstinado y soberbio relajo a ese círculo de entreguismo, violencia, corrupción y subdesarrollo que hasta ahora observamos.

Ridley Scott en su Waterloo

  Las oscuras nubes de unas horas bajas no solo ensombrecen a Occidente en su enfrentamiento con Rusia para conservar la unipolaridad en el ...