lunes, 31 de diciembre de 2018

La nueva capital inca



El limeño sigue desorientado y disidente de lo andino, suspendido, sin piso cultural originario. Algunos ridículamente apoyándose con poses traídas de Miami,  Madrid o Asia se obstinan en no aceptar su legítima identidad cultural, sana y coherente, viéndose desde afuera como huachafos, incultos y con enormes complejos de inferioridad, arrastran de esta forma a todo un país, salvo los bolsones de lucidez y actitud digna  que se han creado históricamente dentro en Arequipa y el resto de los Andes sur peruanos.
Mientras esto ocurre con Lima cuyo nombre, para disgusto de ellos, deriva del vocablo quechua: Rímac,  a miles de kilómetros al sur, en la ciudad de Santiago capital de la República de Chile, un grupo de científicos liderados por el arqueólogo Rubén Stehberg, estuvieron buscando en el subsuelo de esa urbe los antiguos restos que evidenciarían que la capital mapocha  antes fue fundada  por los incas.
Finalmente en 2016 esta hipótesis se confirmó porque en los tres sitios escavados se encontraron restos de cerámica con decoración distintiva del período incaico.
En el local del ex Congreso Nacional en un evento denominado "El Tinku de Santiago" se presentaron  estos hallazgos.
"Su Plaza de Armas fue primero una plaza incaica", aseguró el especialista. "Los edificios públicos incas se localizaban en su contorno y fueron aprovechados por Pedro de Valdivia (supuesto fundador español de la capital chilena)"
Resulta incongruente  que la capital del Perú por su población y legítima heredera de la cultura inca desprecie, oculte o niegue cualquier rasgo andino, inca o quechua dentro de sus manifestaciones;  mientras tanto su antítesis chilena con tan marcado rostro occidental se encuentre construyendo su identidad nacional en algunos restos incas.
Esto es de nunca acabar, lo mismo sucedió con Arica y Tarapacá, territorios abandonados por Lima y que luego de una sangrienta guerra fueron arrebatados por los sureños.
Luego vino el pisco, catalogado por esas mismas élites limeñas como bebida de los cholos, y luego de ser ninguneado, abandonado y despreciado fue recogido por los astutos vecinos del sur y elevado a la categoria de bebida nacional.  Tuvo que pasar todo esto para que los peruanos reaccionaran y comenzaran a revalorarlo.
Ahora los chilenos como  todo país que quiere desarrollar, en la búsqueda de su identidad primigenia y nacional, han elegido tomarla de los incas, que para suerte de ellos colonizaron gran parte de su territorio antes de la llegada de los españoles.
No pasará mucho entonces para que observemos de nuevo sorprendidos que la chicha de jora será la nueva bebida nacional chilena junto con el idioma quechua que seguramente será puesto como enseñanza obligatoria en sus escuelas, y desde Lima mirarán cómo los compatriotas de Pablo Neruda buscaran cambiarse sus apellidos españoles por unos más auténticos y autóctonos chilenos, quizás quispe o mamani sean  los más preferidos.
No pasará mucho para que en esa realidad reclamen al Cusco junto con Machu Picchu como sus santuarios originarios, por ser parte de  ese núcleo de la futura nación autóctona chilena.
Y mientras esto ocurre, los limeños seguirán despreciando lo andino y negando su verdadera identidad cultural y cuando se den cuenta de su torpeza, ya será muy tarde, porque tal vez esa riqueza cultural inca o quechua ya será propiedad chilena.  

domingo, 30 de diciembre de 2018

El raj y sus doscientas millas



El Japón, a finales de la Segunda Guerra Mundial, después de las dos bombas atómicas, con el territorio devastado y ocupado, en esos momentos de crisis y austeridad, solo dos productos no fueron gravados con impuestos: el arroz y el pescado.
Parece que hubiéramos vivido algo utópico pero sucedió en nuestro país, y no hace mucho. Ese camión frigorífico estacionado en ese mercado popular en aquel distrito arequipeño, tenía el logo de un pez que decía Pesca Perú. En esos tiempos  en la ciudad andina de Arequipa a sus más de 2335 m.s.n.m., se podía encontrar pescado fresco a precios módicos. Eran otras épocas, donde la lucidez de un estado se preocupaba por la alimentación de su población, gracias a ello,  muchos de mi generación, tuvimos la suerte de alimentarnos con los mismos nutrientes que tambien  beneficiaban a los nipones.
Al son de esos conocidos estribillos: “tenemos un mar rico”, “las doscientas millas”, “el mar de Grau” y,  esas “dilatadas costas”, etc., es deprimente saber que,  a pesar,  de contar con semejante despensa ictiológica, los precios de estos productos sean tan elevados en los mercados.
A esto se suma lo  paradójico de ver al Perú con semejantes ventajas naturales en cuestión pesquera y que no posea una marina mercante propia y ni mucho menos cuente con una flota pesquera respetable, o por lo menos con  un buque factoría, aunque sea usado.
A esto nos ha reducido Alberto Fujimori Fujimori desde que privatizó el sector pesquero nacional con la excusa de que era obsoleto. Terrible perversidad que dejó a los peruanos.  
El famoso mar de Grau aun no somos capaces de explotarlo mientras tanto otros se llevan todo nuestro pescado porque esta novela trágica tiene su lado sarcástico cuando te enteras que el buque factoría más grande del mundo llamado El Lafayette venía utilizando la bandera peruana para depredar nuestro mar.  Millones de toneladas de pescado que nunca  terminaron en la  mesa de los peruanos y esto ya es para jalarse de los pelos y soltar una carcajada que se escuche hasta los confines de las doscientas millas.
Este buque factoría, llamado en su momento Lafayette, se sabe que fue construido en 2008 a un costo de alrededor de US$100 millones por la empresa Pacific Andes International Holding.
Este monstruo que ostentaba la bandera peruana desde julio del 2014, cambió  varias veces de emblema con el objeto de eludir controles. Funcionaba como un buque madre para el traslado de las capturas de otros pesqueros de arrastre que lleva en su interior. Luego, de clasificar las capturas, procesarlas y congelarlas a bordo, las transportaba posteriormente a los respectivos mercados.
Por la magnitud y la forma ilegal de pesca El Lafayette fue visto como un riesgo para la preservación del hábitat marino, por eso en el año 2015, fue prohibido seguir pescando. Los expertos han calculado que diariamente llegó a procesar a bordo aproximadamente 547 mil toneladas de pescado, de los cuales ni uno solo terminó en las mesas de los peruanos.
Lo último que supimos de esta nave fue que en el año 2016 cambio el nombre a El Damanzaihao, y terminó fondeado a 8 millas náuticas del puerto de Chimbote.
Mañana me comeré un delicioso jurel frito, acompañado  no de un rap sino de un “raj” bien peruano. No lo digo yo, lo dicen los hechos.

sábado, 29 de diciembre de 2018

Madalyn Murray O'Hair



Hoy que vivimos en el Perú una democracia, todavía falta mucho por hacer en materia de libertades personales, como la libertad de pensamiento por ejemplo.
La educación pública peruana sigue sujeta al mandato de los rezos y las persignaciones  impuestas por el curso de religión católica y nadie hace nada. Miles de niños y jóvenes nacidos escépticos o de familias no religiosas, son sometidos a creencias religiosas  que no comulgan, pero lo tienen que soportar porque es simplemente obligatorio, y esto en una sociedad civilizada es terriblemente  injusto.  
Es que también es entendible de que en esta coyuntura religiosa el peruano escéptico  haya optado por el silencio y el sometimiento al mandato de la religión porque de oponerse esto le significaría no solo poner en peligro su empleo sino hasta su propia integridad física si se topara con grupos fundamentalistas religiosos que aquí abundan.  
Pero el mundo está evolucionando y el número de libre pensadores cada vez más va creciendo gracias a pioneros en la lucha por la defensa de sus derechos sobre todo el de ejercer su libre pensamiento. Una fue Madalyn Murray O'Hair, una verdadera mártir del libre pensamiento, que cansada de un entorno asfixiantemente religioso, como muchos en el mundo, solo exigía respeto  y que las leyes de su país  tomarán en cuenta a  este numeroso sector de su sociedad.
Madalyn Murray O'Hair, nació el 13 de abril de 1919 en Pittsburgh, Pensilvania, de padre presbiteriano y  madre luterana. 
Durante la Segunda Guerra Mundial ingresó en el Cuerpo del Ejército de Mujeres y hasta el final de la guerra trabajó como criptógrafa en Italia.
Tuvo una vida personal muy agitada primero por oponerse a  ese patriarcado machista y luego al no aceptar la restrictiva autoridad religiosa.
Estudió Leyes, y su condición de atea rodeada de un entorno laboral muy místico y religioso le iba a dificultar mantener un empleo.
En 1960, mientras su hijo menor sufría la imposición religiosa en una escuela pública en Baltimore, Murray presentó una denuncia contra el sistema de escuelas de la ciudad, por sus prácticas obligatorias de oración y lectura de la biblia. Tres años después, la Corte Suprema de los Estados Unidos falló a su favor y declaró inconstitucional esta práctica en las escuelas del estado de  Maryland.
"El Estado no tiene potestad para promover creencias religiosas", sentenció la Corte.
Este hecho precursor en el mundo anglo que hoy no tendría discusión en Londres significó una gran victoria para esta mujer, pero esto también despertó  el odio irrefrenable de esos poderoso grupos religiosos que no pararían  hasta desaparecerla.
Murray fue atacada constantemente viéndose obligada a abandonar el continente y mudarse a Hawái con sus hijos.  Allí se volvió casar y adquirió el apellido O'Hair.
En 1963 fundó la Asociación Atea de Estados Unidos, una organización que ha llevado más de 20 casos a distintas cortes federales tratando de marcar una separación entre Iglesia y estado.
Uno de esos litigios hizo que la Corte Suprema prohibiera  actividades de culto religiosos en las escuelas públicas por considerarlas una violación de los derechos de la Primera Enmienda de la constitución de ese país.
Para ese entonces O'Hair, era una enorme piedra en el zapato para esos poderosos grupos religiosos.
En agosto de 1995 Madalyn Murray O'Hair  junto a su hijo mayor y su nieta desaparecieron misteriosamente. Más tarde las Investigaciones oficiales dirían que fueron  secuestrados y luego asesinados como parte de una venganza personal de uno de sus  exempleados, y con esto quedó cerrado el caso.
Lo real es que en pleno siglo XXI gracias a estas  personas pioneras como ella hoy en el mundo (y en nuestro país) el número de ateos va creciendo su número pacíficamente, pero, siempre esto despertará el odio y la persecución de personas y  grupos religiosos intolerantes y violentos.

miércoles, 19 de diciembre de 2018

Cerro Verde y las navidades sin lluvia



Si algo recuerdo de las navidades que pasé en mi niñez, durante la década de los setenta, es que esas noches buenas y veinticincos de diciembre  eran días nublados, fríos, lluviosos y con  olor a tierra mojada; es verdad, antes, las precipitaciones pluviales eran  más intensas sobre la ciudad de Arequipa.
Ahora es distinto, porque durante estas fiestas el cielo se mantiene despejado y el calor infernal derrite y sofoca, asfixiando cualquier recuerdo cuando el periodo de lluvias comenzaba en el mes de diciembre. Hoy, a duras penas,  cae unas cuantas gotas en enero o tenemos tres días de lluvia torrencial en febrero o marzo y el resto del año el cielo arequipeño se mantiene tan despejado y seco como el mismo desierto de Atacama.
Bueno, es cierto que este lugar siempre ha sido árido, solo que estas tierras calcinadas se daban un respiro con el periodo de lluvias, tan esperado desde siempre por el arequipeño.
A este problema no le tomaba mucha importancia  porque creí que era consecuencia natural del cambio climático o de un proceso de desertificación, era lo que creía, hasta que leí cuantos millones de dólares perdía la minería a tajo abierto cuando dejaba de  extraer o trabajar  un solo día de lluvia.   Y ahí no quedó la cosa, porque mi preocupación aumentó aún más, cuando me enteré que existían tecnologías que podían ahuyentar las lluvias, uno de esos métodos se aplicó en Moscú-Rusia la mañana del 9 de mayo del 2016 en el desfile por el día de la victoria. Desde temprano se pronosticó sobre la ciudad copiosas lluvias y las autoridades enteradas del fenómeno y sabiendo que el mal tiempo  desluciría esta importante celebración nacional, se vieron en la necesidad de esparcir en avionetas compuestos químicos sobre la atmosfera de esa capital euroasiática,  provocando que ese día transcurriera sin ningún contratiempos y con el cielo completamente despejado y un sol radiante.
Este método denominado 'siembra de nubes' que se conoce desde la década de 1940 modifica el clima, intentando cambiar la cantidad o el tipo de precipitación que cae de las nubes mediante la dispersión de sustancias en el aire. El químico y meteorólogo estadounidense Vincent Schaefer inventó esta técnica.  Y hoy lo utilizan en el mundo no solo los estados que cuentan con esta tecnología sino también las grandes empresas que se dedican a la extracción de minerales.
No soy mal pensado ni tengo nada contra la minera Cerro Verde, pero, quién me asegura que esta empresa no esté utilizando estos métodos sobre el cielo de Arequipa.  
El incremento de la producción de cobre de los últimos años, la ampliación de sus instalaciones convirtiéndolo en uno  de los asientos mineros más grandes a cielo abierto de América y el mundo,  ha coincidido también, con el declive de las precipitaciones pluviales sobre  la ciudad de Arequipa.
Es difícil no desconfiar en la minera Cerro Verde que está a menos de cinco kilómetros de la ciudad de Arequipa, sobre todo cuando observamos el “mal trato”, la mezquindad y la inquina que tiene sobre la población arequipeña. Ante esta realidad, no esperamos nada bueno de parte de este hostil vecino.
Se acerca otra navidad más y parece que será igual de calcinante, sedienta e irrespirable que todos estos años en que ha ido crecido la minera Cerro Verde. 

domingo, 16 de diciembre de 2018

Llica y los derechos de autor



Ahora que lo recuerdo, tenía un gran parecido con el señor Burns,  aquel  personaje de los Simpson. Enseñaba la asignatura de Educación por el Arte  y no pasaba ni un solo día en que no nos recordara que su  apellido Centi era de origen italiano.  Si bien nos aprobó el curso por comprar su libro, no dejaba de ser un repulsivo racista. Sus prejuicios lo cegaban a tal punto  que lo hacía ver  como el más cerril e ignorante, una vez, llegó a asegurar que la ciudad de Arequipa se encontraba en la costa, y se mostraba seguro y obstinado en su afirmación, a pesar que  tenía a sus espaldas el mapa de Javier Pulgar Vidal en donde se veía claramente que esta urbe con sus 2,335 m.s.n.m., se situaba  iniciando  la región quechua.
Era soberbio y déspota  a extremos y renegaba contra toda aquella persona que usara polleras o tenga aspecto de indio, era un insufrible fascista seguidor de Mussolini  y extraviado en medio de los Andes, un  desquiciado, martirizado hasta sus últimos días por vivir en una ciudad andina que hasta el final no quiso aceptarlo, como muchos por aquí.
Es que la ciudad de Arequipa es andina por donde la mires, a pesar de su centro histórico que aún conserva ese distante y obsoleto hispanismo. Y justamente, ese carácter andino, se mostró  en las últimas elecciones regionales.
Esa mañana el muro que está al costado de ese mal hecho “bye pass”  construido por el ex alcalde Zegarra con dinero de la minera Cerro Verde, amaneció con una enorme inscripción que decía: “LLICA”.
Ya habían pasado unos meses desde que nos cancelaron el programa de radio, seguramente por despotricar en contra de la iglesia y sus monjes, no recuerdo bien, pero, de todo lo que dijimos en ese programa durante los nueve meses que existió, cuando había la oportunidad, con evidencias, mostrábamos que la cultura andina peruana, oriunda, autóctona, nativa, etc., no tenía nada de inferior cuando la comparamos con la hispana y que los prejuicios en contra de los apellidos andinos no tenía razón, ya que para un peruano llevar un apellido indígena, andino u originario peruano debería ser motivo de orgullo.  Parece que todo esto caló hondo en muchos,  sobre todo, en aquellos políticos que quieren salir de lo común. Fue lo primero que pensé cuando vi esa inscripción en aquel muro. Luego lo corroboré en un diario local, en una entrevista del ex alcalde de Caylloma, cuando afirmaba que sobrepuso su apellido quechua Llica sobre el hispano Cáceres porque se sentía más identificado con lo andino.
Para desprestigiar a alguien en este país o te acusan de maricón  o de lo contrario de violador, y fue lo que pasó con Cáceres Llica en esta última campaña electoral, así que no caeremos en lo mismo, solo trataremos de ser objetivos.
Cáceres Llica ganó estas elecciones regionales porque supo aprovechar su origen andino que es el de la mayoría de la población en Arequipa y en el resto del Perú.  
No solo resalto su apellido quechua sino que aprovecho uno sus debates para revalorar al puma, desconocido para la mayoría de arequipeños que es propio de la fauna local, y  que nosotros, hace algunos  meses, ya lo habíamos afirmamos, que el verdadero “León arequipeño” no era ese africano que muestra constantemente el confundido FBC Melgar, sino, ese puma andino, y  esto, debería de difundirse y revalorarse en la ciudad blanca. 
En ese debate, parece que Llica escuchó este clamor y cuando estaba acorralado por los ataques del contrincante, no tuvo mejor idea que poner en la mesa de discusión el tema del gran felino arequipeño, dejando a Ísmodes y a toda su prensa como ignorante y prejuiciosa.
Por estas razones se produjo el triunfo de Elmer Cáceres Llica.
A pesar de haber tenido una intrascendente gestión como alcalde provincial de Caylloma, tuvo la inteligencia de seguir estos consejos, lo cual le ayudaron para obtener la victoria.
No cobraremos derechos de autor ni mucho menos, pero es una realidad que cuando uno rescata en el Perú estos aspectos milenarios el triunfo les estará siempre acompañando, sobre todo en política.
La coca nos dice que Elmer Cáceres Llica, una vez en el sillón de gobernador de Arequipa, tendrá dos caminos, uno predecible y esperado por muchos,  el que igualará en inoperancia y torpeza  a la saliente ex favorita de los magnates de la política local, el de los escándalos y ritos demagogos y frívolos, saturado de persignaciones, rezos y sacrificios a los apus, nepotismo y enriquecimiento ilícito.
El otro camino es de asumirse el reto del líder andino, obrando con lucidez y reciprocidad milenaria con las mayorías, es la senda del estadista, es que el sur esta agitado, es como si estaría aún vigente el aliento del gran Andrés de Santa Cruz  cavilando para que renazca ese estado sur peruano y esa Confederación que nunca debió extinguirse.

martes, 4 de diciembre de 2018

Imbecillus



Desde que aparecieron en el Perú, aunque pasen  los siglos, este tipo de gente se recicla y permanece.
Son huachafos y degradados como los más salvajes corruptos que pastean tercos su decadencia.
Cargan las andas de cuanto cristo le pongan al frente solo por política.
Es que seguro de niños alguien les dijo que deberían ser pendejos y que no sean cojudos para que así tengan “plata” y poder.  Es que siempre fue así. No lo dudaron porque la mayoría hacia lo mismo o por lo menos se dejaron influenciar. Y los cojudos no midieron las consecuencias ni buscaron el equilibrio, devastando a sus propias proles y al país mismo.
Son degradados porque a pesar de ser cholos, indios o "chinos" con pelos lacios y ser originarios de algún lugar de los Andes dicen, en pleno siglo XXI, que son de Camaná o algún otro lugar de la costa peruana para  que los confundan y los ubiquen dentro del grupo de criollos, blancos o descendientes de hispanos y se vuelven –como era lógico- enemigos de su propio país, o sea, de todo lo andino.
Y esto les lleva inclusive, y aberrantemente, a discriminar a su propio hijo por el hecho de haber nacido más osco que el resto.
Son tan huachafos que algunos han colocado la palabra “De” delante de su apellido para que suene más aristocrático y colonial. Es decir, están sumidos en la Edad media con ese pensamiento desmedidamente rural de castas y toda esa ridícula cojudez de otros tiempos.
Piensan que pertenecen a una raza inferior y dañada por eso viven con la sola esperanza de algún día "mejorar su  raza". Ya que carecen de sentido de pertenencia con lo peruano, como políticos siempre serán unos topos apátridas.
Son el típico y moderno peruano arribista  que abundan en las listas de esos conocidos y exclusivos clubes de las ciudades más importantes.
Son copia fiel de sus abuelos y bisabuelos o de sus mentores, con nombres de Riva Agüero, Prado, Leguía o Billinghurst.
Se envalentonan pero son “mantequilla” y los más "gallinas" porque nunca  ganarían  una guerra porque carecen de convicción, ideales, identidad étnica o de nación. Viven en el limbo de falsear sus personalidades.
El otro día uno de ellos escribió que iría a Lima a defender a su amigo que estaba pasando por un mal momento porque afirmaba que lo estaban persiguiendo, tremenda injusticia.
Ahora está más preocupado todavía porque a su "compadre" -supuestamente- “perseguido”,  no le dieron ese tan anhelado asilo.
Deberían dejar esa adolescencia perpetua a la que han sido condenados y madurar e interiorizar conductas y valores de su verdadera nación milenaria, dejar de ser el principal obstáculo para que nuestro país y nuestra sociedad mejore algun día. 

martes, 13 de noviembre de 2018

Califas y taifas en el Perú



Que visite al Perú Felipe VI , el actual rey de España,  no es raro, ya que ese país tiene importantes inversiones en nuestro territorio. Son ineficientes y cochambreras, pero ahí están sus empresas contribuyendo en algo con nuestro desarrollo.
Como ya dijimos, que visite nuestro país no resulta extraño, lo preocupante es que haya incluido  dentro de su tour al Palacio de justicia peruano; ahí, todo esto, se torna nada grato.
Ahora que se respira vientos de cambio y una atmósfera más sana,  en donde,  la justicia lorcha está dando una imagen de autonomía y mejora, y que no solo fortalece a esa institución, sino que, a todo un Perú que intenta  afianzarse como una democracia respetable, no es una buena señal que un  personaje tan rancio y discutido sea visto paseando  por sus pasillos.
Es que Felipe VI no se puede apartar de esa  imagen  tirana y represora que lo acompaña como sombra y que preocuparía a cualquiera que cree firmemente en la libertad de expresión y la  libre determinación de los pueblos.
No es una visita grata y ahora paso a explicar el por qué.
Primero, porque antes de coronarlo rey, el pueblo español exigía una consulta para ver si continuaba o no dicha monarquía; a pesar de ello, ese régimen hizo caso omiso a ese pedido justo y democrático. Y, mientras, coronaban al nuevo rey, afuera de ese palacio, los gritos de muchos españoles exigían  el fin de ese régimen heredero del franquismo. Fue tan violenta la represión, que varios jóvenes terminaron con las cabezas rotas y muchos de ellos detenidos.
Ahí no acabaron estas demostraciones de poder absoluto de este régimen que no parece occidental, sino, más bien, se  asemeja al accionar de un “califato”  o una “taifa” déspota, pero, ahora incluido dentro de la Unión Europea.
El nuevo rey, ni bien terminó de asumir su cargo, su primera gran tarea   fue solucionar  el referéndum independentista catalán, un pueblo que solo quería ejercer la libre determinación, ese principio jurídico que hizo posible el nacimiento de nuestro país hace casi doscientos años. De ese derecho, no pueden gozar hasta  este momento los catalanes.
No hubo dialogo, todo lo contrario, la represión fue el principal argumento  que aplicó Felipe VI para solucionar ese problema.
El  regreso de medidas, personajes y grupos franquistas;  la detención de pacíficos cantantes por el solo hecho de exigir libertad de expresión en sus letras, nos recuerdan a esas caravanas de la muerte de Pinochet  y, sin lugar a dudas, desacreditan a la actual monarquía española, mostrándola  desfasada y anacrónica, cuando  eligen la violencia, la censura y la represión para tratar los principales problemas de ese país.
Claro, que aquí, existe gente, que se siente cómoda con este tipo de pensamientos y actitudes, y a muchos de ellos los encontramos en el actual Congreso fujimorista, y fue ahí, no era para menos, donde Felipe VI fue agasajado y condecorado con mayor fervor.
La república española fue producto de un desarrollo histórico espontaneo y natural y fue cortado de forma abrupta por el régimen franquista y a pesar del periodo de  transición y su intento de presentarse como moderno y democrático, no podemos negar, que todavía guarda manifestaciones de ese pasado régimen tirano y, esto, siempre será una "mala hierba" para toda aquella Hispanoamérica que busca fortalecer  y hacer sustentables sus distintos  regímenes democráticos.

Ridley Scott en su Waterloo

  Las oscuras nubes de unas horas bajas no solo ensombrecen a Occidente en su enfrentamiento con Rusia para conservar la unipolaridad en el ...