Coincido con el veterano Julio Iglesias cuando afirma que lo
mejor en la música anglo se hizo
en la década de los setenta. La lista es larga de todos esos eximios solistas y notables grupos que aparecieron durante esa época. Uno de los que
más éxito cosechó fue el dúo de hermanos “The Carpenters”, durante su carrera obtuvieron
varios números 1 en la lista de la Billboard, llevando a que sus clásicos temas sean hasta
ahora programados por las radioemisoras
locales.
A propósito de ello, este
cuatro de febrero se recordó un año más
de la sensible desaparición de su conocida
vocalista Karen Carpenter, poseedora de una voz privilegiada, pero también fue la
infausta protagonista de una de esas conocidas historias que se repite en muchas estrellas estadounidenses, en donde el denominado sueño americano se manifiesta
como una fantasía fatua y vacía que
se reduce al éxito económico y desenmascara la podredumbre humana de la pena, la soledad,
el abandono y la envidia de los más cercanos. El drama de Karen Carpenter,
giró alrededor del que no acepta la
gravedad de su enfermedad y al final termina por sucumbir ante esta.
TELEVISA, repulsivo conglomerado de medios de comunicación que día a día embrutece y censura a millones
de analfabetos mexicanos, tiene en el Perú a su más destacada
deposición: América Televisión. ¿Qué más se podía esperar del canal más importante de Lima? Su programación le da como anillo al dedo. Noticieros en donde se muestra
malformaciones, suciedad y decadencia y sus
estrellas que cada vez que se destapa algo de ellos despiertan en muchos vergüenza
ajena del nivel de degradación al que han caído. No solamente han perdido el
respeto al público con tanta programación basura sino sobre todo han perdido el respeto por ellos
mismos.
En ese estudio de televisión, en donde,
diariamente Fiorella Rodriguez da
las noticias de la farándula, las cámaras ya no saben que tomas más hacerle
para disimular en algo su extrema delgadez. Al final, resignados, el director optó por hacer “las tomas” desde un ángulo superior, así, su desmejorado aspecto no se notará mucho.
Cuando alguien intenta indagar sobre
su estado de salud, ella ansiosa insiste que está bien y más sana que el Doctor
TV. Queriendo convencer a todo el mundo que no pasa nada, resaltando que sus negocios van viento en popa.
Contradictoria y temblorosa como si estuviera hasta las orejas de
barbitúricos cambia de tema y terca recalca que aquí no hay de qué preocuparse
y que profesionalmente esta recontra bien.
La brutal cadena de televisión
peruana ha puesto en escena el mejor reality, para que diariamente los
peruanos observen cómo se deja morir a alguien. A tal punto ha llegado
la salvajada de estos insensibles que gozan
del morbo de los asistentes a este circo romano. Nadie mueve un dedo en
ese estudio hipócrita y malnacido. A nadie le interesa la salud de nadie. Solo
quieren dinero y ganancias como el peor
muerto de hambre.
Necios, niegan, que están cegados por la soberbia del insignificante, despreciando la vida y la salud, aunque esta sea mental. Quieren tapar el sol con un dedo, intentando
ocultar la descomposición a la que han llegado, pero solo dan vergüenza por el
primitivo estado al que han caído
como su desdichada proveedora TELEVISA.
América televisión colabora de forma notable para que nuestra sociedad no de un paso más
adelante en educación y dignidad, es una pena que todavía mantenga las malas
artes que les caracterizó cuando dirigidos por los Crousillat se convirtió en
el abanderado del fujimorismo.